Por Claro Manuel Fernández-Caballero Martín-Buitrago.
La Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Inmaterial de la UNESCO (París, 2003) establece que el patrimonio cultural inmaterial se constituye por los “usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas -junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes- que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural”.

A su vez, hablar de patrimonio cultural inmaterial es hacerlo también de un sentimiento de identidad que se transmite de generación en generación. Llegados a este punto, sin duda, todos los que estéis leyendo estas líneas estaréis pensando en nuestro carnaval. Este engloba usos sociales, rituales y festivos, junto con tradiciones y expresiones orales, que se han convertido en uno de los principales legados de nuestra comunidad y sin duda en su principal seña de identidad. De todos ellos, con el fin de remarcar su importancia y sensibilizar sobre una realidad intangible pero esencial de la identidad cultural del mismo quisiera, en esta ocasión, dedicar unas líneas a las expresiones orales inherentes al Carnaval de Herencia.
Expresiones como «¡ay que torpe, que no me conoces!», «Perlé, ¿por dónde?», «Perlé pichahuevos», etc., junto a su carácter fonético, morfosintáctico y léxico son elementos del habla que forman parte de la idiosincrasia de una fiesta, de una cultura, de una tradición y en definitiva de una identidad, como es el carnaval herenciano al cual dotan de una riqueza y diversidad únicas sin las que no se podría entender. ¿Quién se imagina un carnaval sin escuchar la “voz en pito” o “falsete” de las máscaras? Lo uno sin lo otro no tiene sentido, y por extensión, sin máscaras callejeras tampoco se entendería lo que significa hoy nuestro carnaval.

Pero no son estas las únicas expresiones que conforman el patrimonio oral del carnaval herenciano. Dentro de este apartado se ha de dedicar un capítulo especial a los grupos, murgas, estudiantinas, tunas, charangas y, ahora también, chirigotas que durante los días del carnaval cantan de calle en calle, de plaza en plaza o de bar en bar, letras alegres y divertidas que buscaban sobre todo la complicidad de las personas que las escuchaban. Recuérdense aquí las letras de Oviedo o Sabas, en los años 50 del pasado siglo XX, a las que le siguieron las composiciones del conocido «JoséBucha» y «José María Ramírez» y más recientemente las coplillas de agrupaciones como “El Pitorro”, “Piu-Piu”, “Miriñaque”, “La Copa”, “El Clan Familiar”, o “Topitu de Baratiyo”, por citar algunas de ellas hasta llegar a las más actuales de la chirigota de “Los Pelendengues”.
Estas coplillas eran, y todavía hoy siguen siéndolo, muy esperadas en carnaval, pues se convertían en el más auténtico noticiero de la localidad. «Vas a salir en coplas», se solía escuchar cuando alguien hacía o le sucedía algo extraordinario o fuera de lo normal. Se celebraban chismes e intrigas, embrollos y enredos, e incluso en alguna ocasión se revelaban «secretos» que estaban en boca de todos pero que nadie se había atrevido a contar de viva voz. La inspiración y la creatividad se palpaban durante estos días en las letrillas que, aunque muchas veces pudieran tocar temas delicados, siempre lo hacían de una forma jocosa, divertida, intentando no faltar al respeto y buscando la complicidad de la gente.
Este patrimonio oral, es por tanto un patrimonio de incalculable valor imprescindible para entender la idiosincrasia de los carnavales de Herencia, pero también los acontecimientos que marcaron a varias generaciones. Un patrimonio que todos estamos obligados a preservar pero que cada año que pasa, desgraciadamente, se encuentra en mayor peligro debido a la propia y natural evolución de nuestra fiesta que, hasta el momento, no ha sabido conjugar esta tradición oral con la actual forma de vivir el carnaval. Por ello, desde las asociaciones Carnaval de Herencia, Denominación de Origen y Barco de Colegas se está trabajando en la recopilación de esta tradición oral y han organizado dentro de las jornadas culturales “Torpe, torpe, que no me conoces” una charla-coloquio donde tratar este tema y a la cual desde aquí os invito a asistir y participar, para, entre todos, seguir construyendo el Carnaval de Herencia.
Artículo publicado en el libro-folleto Carnaval de Herencia 2014.